SE ACERCA LA NAVIDAD, Y CON ELLA LOS REGALOS A NUESTROS
CLIENTES ES SU TRATAMIENTO FISCAL? ¿LOS GASTOS PRODUCIDOS
POR ESTOS REGALOS, SON DEDUCIBLES?
Se acerca la navidad, y como ya sabemos, en esta época son frecuentes
los regalos a nuestros clientes.
Si bien los gastos que producen esta práctica
habitual no son deducibles del Impuesto sobre el Valor Añadido, sí
que serán gastos fiscalmente deducibles en cuanto al Impuesto sobre Sociedades
se refiere.
Respecto al IVA, los bienes o servicios destinados a atenciones a
clientes no pueden ser objeto de deducción. La entrega de regalos realizados
por la empresa a sus clientes constituye una operación de autoconsumo no
sujeta a IVA.
Por lo tanto, las cuotas soportadas en la adquisición de
los bienes ofrecidos como regalo no son deducibles. La ley del impuesto excluye
de la deducción los gastos por la adquisición de bienes que la empresa
pretende regalar a sus clientes. La Ley del Impuesto sobre Sociedades, establece
que los gastos por relaciones públicas con clientes o proveedores y los
que con arreglo a los usos y costumbres se efectúen con respecto al personal
de la empresa serán gastos fiscalmente deducibles.
Puede entenderse que
los regalos de las empresas efectuados a sus clientes en la época navideña
responden a una costumbre social y que no se trata de donativos y liberalidades;
por lo tanto, la empresa podrá deducirse fiscalmente el gasto derivado
de la compra de esos regalos lo que puede resultar una opción totalmente
recomendable para las empresas que pretendan realizar un obsequio navideño
a sus trabajadores.
Por otra parte, la propia Ley 43/1995, del Impuesto de Sociedades, establece
en su artículo 14.2 que las cantidades o los bienes entregados en concepto
de donativo a determinadas entidades, enumeradas específicamente en dicho
artículo, serán deducibles. A modo indicativo serán deducibles,
las aportaciones satisfechas a : Los clubes deportivos. La ONCE. La Cruz Roja
Española. Las organizaciones no gubernamentales ( Intermón Oxfam,
Médicos sin Fronteras, Greenpeace...) Las universidades públicas.
La iglesia católica.
Diciembre 2003